Hace poco más de un año, en agosto de 2015, los entonces candidatos a la Gobernación, el radical José Cano y el peronista disidente Domingo Amaya, anunciaban en un hotel situado frente al parque 9 de Julio -donde habían erigido su búnker- que habían tomado la decisión de judicializar las controvertidas elecciones provinciales. Ayer, ya como funcionarios del Gobierno nacional, ambos fueron anfitriones, en el mismo hotel, del lanzamiento de la mesa de conducción de Cambiemos-Tucumán. Y, como un déjà vu, los cuestionamientos a los comicios provinciales -en los que se impusieron Juan Manzur y Osvaldo Jaldo, del FPV- volvieron a resonar en los oídos de macristas, radicales y peronistas disidentes.
Esta vez, sin embargo, quienes arengaron a la “tropa” no fueron los tucumanos, sino dos de los hombres fuertes del presidente, Mauricio Macri: el jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña; y el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio.
“Cuando se conformó este espacio político, muy pocos apostaban a que íbamos a llegar a la elección juntos. Muchos menos a que podíamos ganar. Pero se ganó a nivel nacional y, digan lo que digan, ¡se ganó acá también, en la provincia de Tucumán!”, exclamó Frigerio ante los intendentes, legisladores, concejales, funcionarios y dirigentes locales de Cambiemos.
Los aplausos tronaron entonces, y también luego, cuando Peña tomó el micrófono. “Por ahí hemos sido un poco injustos con Tucumán, porque se habla mucho del aporte enorme que hizo Córdoba el año pasado, del aporte de Provincia de Buenos Aires, de nuestra querida Jujuy; pero el grito de rebeldía que surgió acá, en Tucumán, fue muy importante. Sin dudas fue un punto de inflexión en la campaña, un llamado de atención”, advirtió el jefe de Gabinete de Macri.
Alianza política
Peña y Frigerio llegaron a esta provincia un día después del lanzamiento -en Buenos Aires- de la mesa nacional de Cambiemos, que encabeza el Presidente. Ayer fueron recibidos por Cano y Amaya; por el director de AySA, Pablo Walter; por el diputado Facundo Garretón (PRO); por los intendentes Germán Alfaro (capital), Mariano Campero (Yerba Buena), Roberto Sánchez (Concepción), Sebastián Salazar (Bella Vista); y por legisladores, concejales y funcionarios que integran esa alianza política.
Frigerio consideró que el frente Cambiemos tiene una “responsabilidad”. “Si le decimos a la sociedad que venimos a cambiar, a unir a los argentinos, a ser más tolerantes, a priorizar el diálogo, a concentrarnos en lo que estamos de acuerdo, y no en gastar energías en qué cosas nos diferencias, no podemos pedirle a la sociedad lo que no podemos lograr internamente en nuestro espacio. Entonces, esta demostración de lo que pasó ayer (por el jueves) a nivel nacional y lo que está pasando hoy (por ayer) en Tucumán, es lo que nos da después la autoridad moral”, remarcó Frigerio, de pie, en un auditorio del hotel. Y sostuvo que integran “un cuadro político que se nutre de las diferencias”. “Estamos comprobando en 10 meses de gestión que, si trabajamos juntos y en equipo, se pueden lograr los desafíos que nos vamos proponiendo”, añadió el ministro del Interior de la Nación.
Según Frigerio, esos resultados generan más obligaciones todavía hacia adelante. “Lo que hicimos es muy poco con respecto a lo que tenemos por delante. Nos tenemos que organizar, y por eso este llamado a que en todas las provincias exista la mesa de Cambiemos, (para) que se comunique con la mesa nacional y (para) que en todos los municipios y departamentos de Tucumán próximamente podamos hacer una reunión como esta, lanzando la mesa de cada departamento y municipio. Es una responsabilidad que se llevan ustedes hoy”, les dijo a los dirigentes.
Peña afirmó que la intención es “proyectar a futuro”. “Estoy convencido de que 2017 viene será un gran año, y tenemos que estar preparados; a este grupo se van a sumar muchos más voluntarios, militantes, dirigentes”, indicó el jefe de Gabinete. Y les pidió a los integrantes del espacio que mantengan “abiertas las puertas”.
Amaya, en tanto, llamó los dirigentes a “replantearnos la política”. “La pobreza no se combate con el bolsón y el plan social. Tiene que haber un trabajo conjunto en educación, salud, salubridad.”, señaló. Y pidió pensar en la “Argentina de acá a 20 o 25 años”.
Cano recordó cuando en 2007 se lanzó la alianza en Tucumán, y cuando en 2015 se postuló junto a Amaya. “No era un espacio sólo para unas elecciones; teníamos el compromiso de crecer, para que se cumpla con el objetivo de gobernar la provincia. Hoy, la consolidación de Cambiemos, la integración de la mesa en Tucumán, tiene por primer objetivo el fortalecimiento del Gobierno nacional”, aseveró el radical.
ausentes sin certificado.- La asistencia a la presentación de la mesa de Cambiemos no fue perfecta. Entre los invitados hubo varias ausencias, pero cuatro llamaron la atención. La senadora radical Silvia Elías de Pérez no formó parte del convite, pero se excusó con una reunión impostergable que tenía a la siesta de ayer pactada con el presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada. Entre las ausencias sin justificar hubo dos diputados y dos legisladores: faltaron los parlamentarios nacionales radicales Juan Casañas y Teresita Villavicencio; y los representantes de la Cámara Ariel García (el radical es vicepresidente segundo de la Cámara), y Stella Maris Córdoba (presidenta del bloque Peronismo del Bicentenario, afín a la intendencia de la capital). Sí fueron, sin embargo, sus compañeros de bloque: Christian Rodríguez, Alfredo Toscano y Silvio Bellomío.
cano quedó entre peña y frigerio.- En medio de los rumores de bandos políticos y de encontronazos en el gabinete presidencial, el titular del Plan Belgrano, José Cano, quedó ubicado en la mesa entre el jefe de Gabinete, Marcos Peña; y el ministro de Interior, Rogelio Frigerio. Trascendió semanas atrás que habría dos bandos diferenciados: uno encabezado por Frigerio y otro por Peña. Las versiones daban cuenta de que el secretario de Vivienda y Hábitat, Domingo Amaya, quedó del lado de Frigerio; mientras que Cano forma parte del bando de Peña. En la mesa principal se ubicaron, de izquierda a derecha, el intendente capitalino Germán Alfaro, Peña, Cano, Frigerio, Amaya, el macrista y titular de Aysa Pablo Walter, y el secretario de Interior, Sebastián García de Luca (mano derecha de Frigerio). Hubo dos concejales de San Miguel de Tucumán en la mesa: Sandra Manzone, de la Coalición Cívica-Ari, y el macrista Roberto Ávila, vicepresidente segundo del Concejo Deliberante.
Amaya no se afilia al partido de alfaro.- El intendente Germán Alfaro llegó al hotel del evento acompañado por Walter Berarducci (secretario de Gobierno) y por Cristian Abel (secretario de Economía y Hacienda). Si bien el jefe municipal llevaba un prendedor del Partido Justicialista con la imagen de Juan Domingo Perón y Eva Duarte, sus funcionarios exhibían pines con el logo del partido municipal Partido por la Justicia Social (PJS). Apenas cruzaron la recepción se encontraron con el ex intendente Domingo Amaya (ahora secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación) y se saludaron con cierta calidez (foto de la izquierda). Consultado por LA GACETA, el funcionario nacional negó que le hayan pedido formar parte de PJS. “No me puedo afiliar porque estoy inscripto en el Partido Justicialista Nacional. En caso de que me echen a nivel nacional ya tendré donde afiliarme”, contestó sonriente.
un discurso macrista.- . Luego de la presentación de la mesa, a cargo del macrista Pablo Walter (que se desempeña como titular de la prestadora de servicio de agua potable porteño Aysa), el primero en hacer uso de la palabra fue el intendente de la capital, Germán Alfaro. El intendente peronista dejó en claro que apuesta fuerte por la alianza conformada por el macrismo, el radicalismo y la Coalición Cívica a nivel nacional. “Aspiro a que este espacio crezca, que pueda ser gobierno en nuestra provincia. Esto depende de la voluntad y del trabajo que nosotros realicemos. Todos los que estamos acá tenemos que poner el esfuerzo. Estoy acá para comprometerme con el gobierno Nacional, y para comprometerme con mi provincia”, arengó el ex diputado nacional durante el kirchnerismo. “Hoy es un día importante para nosotros, es un punto de partida porque le estamos dando orgánica en nuestra provincia a un espacio político que conduce nuestro país. Si nosotros queremos desterrar esta forma de hacer política de antaño, y que nada ayuda para mejorar la calidad de vida de los argentinos, tenemos que cambiar. Y también quiero decirles que si nosotros buscamos que tengamos menos pobreza en nuestro país y en nuestra provincia, si queremos dejar atrás la inseguridad, también tenemos que cambiar”, finalizó.
la impronta amarilla.- A pesar de que la alianza Cambiemos no está integrada sólo por el macrismo, las costumbres de los actos que organiza el PRO coparon la escena (foto de la derecha). Detrás de los oradores no faltó un banner con la imagen del presidente Mauricio Macri, y de la vicepresidenta Gabriela Michetti. A los pies de la mesa, una hilera de globos de colores ponía color antes de la bajada de línea para los referentes. Ninguno de los políticos llevaba corbata, tal como el asesor de Macri, Jaime Durán Barba, le recomendó en 2007 al líder PRO.
“trabajamos para que la gente viva mejor”.- El diputado nacional Facundo Garretón celebró el lanzamiento de Cambiemos en nuestra provincia. “Cambiemos como espacio es diverso, la diversidad enriquece, aquí la pata peronista es relevante”, explicó el macrista. Indicó que el diputado Federico Masso (Libres del Sur) no forma parte de la mesa porque integra el ApB, y no Cambiemos. “El PRO no está dentro del ApB, fuimos como acople. Masso, a quien respeto mucho, vota diferente en el Congreso”, justificó.